La planificación de un viaje es siempre un momento especial, lleno de ilusión, de descubrimiento, pero también de trabajo, donde uno debe tomar decisiones importantes según lo que tenga intención de hacer durante el mismo. Si nos ceñimos a lo que respecta al tema fotográfico, la elección del equipo nos acarreará un sinfín de conflictos entre lo útil y lo desdeñable, ligero o pesado, usable o desechable. Una decisión importante para la que os ayudaremos un poco.

Si quieres que la experiencia fotográfica de tu viaje sea productiva, y tienes el conocimiento suficiente para ello, la elección apropiada es la de una cámara con objetivos intercambiables. Hoy día hay fantásticas opciones comparándolas con las virtudes de los móviles, hacen que merezca la pena llevarse una de estas y disfrutar el viaje fotográfico de una manera muy distinta.

En cuanto a las cámaras de objetivos intercambiables existen multitud de opciones válidas. Por nuestra experiencia, las más modernas EVIL o mirrorless, cámaras  con visor electrónico y sin espejo, han ganando la batalla a las tradicionales réflex, y según los sistemas, los formatos mas ajustados en el tamaño de sensor consiguen una relación calidad/peso fantástica para retratar cualquier viaje.

Así marcas como Olympus, Panasonic, Fuji, Sony y e los últimos meses también Nikon o Canon ,tienen opciones interesantes para nuestro cometido, y con las cuales tendremos un beneficio en cuanto a versatilidad, con alimentación por baterías independientes de alta capacidad, almacenaje de imágenes mayor y más seguro, conectividad y una calidad de imagen excepcional aplicable a muchas temáticas que encontraremos en nuestros viajes.

Pero la principal de estas virtudes, y que probablemente marque la diferencia, abismal en muchos de los casos, es la inmediatez del disparo, aun siendo rápido en móviles y en compactas, en las cámaras de objetivos intercambiables apretar el disparador significa capturar la imagen de forma instantánea, un tema importantísimo en esto de hacer fotos, y que no se considera hasta que lo tienes.

En segundo do lugar está la relación entre el tamaño del sensor, sus lentes y el procesador, lo que repercute directamente en la calidad de imagen, no solo en resolución, sino también en rango y color de la foto capturada y la foto final tratada. No siempre es cierto eso de que cuanto más grande mejor, sino que el equilibrio y la versatilidad son los que ganan en esta disciplina, como en muchas otras.

Llegados hasta este punto diremos que en Quaints nos decantamos por un sistema llamado MFT,  siglas de Micro Four Thirds (micro cuatro tercios) representado por modelos de Marcas como Olympus y Panasonic principalmente, compatible entre sus accesorios y con un conjunto de características como el de la incidencia de los haces de luz perpendicular al sensor, o sistemas de limpieza y estabilización, que hace de este sistema una referencia única en fotografía.

Existen bastantes modelos que han ido avanzando en aptitudes en los últimos años, pero en fotografía de viajes, nuestra referencia en estos momentos sería la serie OMD de Olympus, con la extraordinaria relación de calidad-tamaño-versatilidad de la E-M5 Mark III.

Se trata de una cámara de corte retro, elegante y compacto, sellada contra la intemperie es resistente al polvo, salpicaduras y congelación hasta -10ºC

Posee una tecnología interna capaz de capturar imágenes de alto nivel de calidad de imagen. Su procesador y su sensor de 20,4 Mpx autolimpiable, con capturas a través de un autoenfoque de alto rendimiento de hasta 30 imágenes por segundo y velocidades de 1/3200s con sensibilidades hasta 25600 ISO. También es capaz de realizar capturas combinadas en alta resolución de 50 Mpx.

Llegados hasta este punto diremos que en Quaints nos decantamos por un sistema llamado MFT,  siglas de Micro Four Thirds (micro cuatro tercios) representado por modelos de Marcas como Olympus y Panasonic principalmente, compatible entre sus accesorios y con un conjunto de características como el de la incidencia de los haces de luz perpendicular al sensor, o sistemas de limpieza y estabilización, que hace de este sistema una referencia única en fotografía.

Existen bastantes modelos que han ido avanzando en aptitudes en los últimos años, pero en fotografía de viajes, nuestra referencia en estos momentos sería la serie OMD de Olympus, con la extraordinaria relación de calidad-tamaño-versatilidad de la E-M5 Mark III.

Se trata de una cámara de corte retro, elegante y compacto, sellada contra la intemperie es resistente al polvo, salpicaduras y congelación hasta -10ºC

Posee una tecnología interna capaz de capturar imágenes de alto nivel de calidad de imagen. Su procesador y su sensor de 20,4 Mpx autolimpiable, con capturas a través de un autoenfoque de alto rendimiento de hasta 30 imágenes por segundo y velocidades de 1/3200s con sensibilidades hasta 25600 ISO. También es capaz de realizar capturas combinadas en alta resolución de 50 Mpx.

Si queremos ir un poco más allá, un Zuiko 9-18mm FF4-5.6 (18-36mm equivalente) como gran angular perfecto en paisajes, un Zuiko 75-300 F4.8-6.7 (150-600mm equivalente) como teleobjetivo todoterreno, y un Zuiko 60mm F2.8 especializado en fotografía macro para completar el equipo. A partir de aquí la gama Zuiko se amplia con multitud de lentes especialistas y profesionales para un mayor uso y disfrute de esta afición.

También es imprescindible en fotografía de viajes un filtro polarizador, que nos ayudará a conseguir colores reales y saturados de nuestra escena, así como un buen trípode de viaje o un pequeño flash para iluminar personas u objetos en la oscuridad.

Una vez elegido el equipo solo nos queda conocer las posibilidades fotográficas que nos ofrecerá el viaje. En las Guías Quaints os adelantamos los detalles de lo que os podréis encontrar en las mejores localizaciones, incluso las posibilidades de luz o la recomendación de temáticas precisas. Solamente empápate de esa información y mantente vigilante, deja que tu visión encuentre el haz de luz mágica y llévate a casa la mejor de las imágenes para el mejor de los recuerdos de un viaje único.